Tras 19 años de presencia en el Campeonato del Mundo de F1, el GP de Malasia se despide de todos nosotros. Y precisamente uno de los que más lo echará de menos va a ser Fernando Alonso. Así lo ha afirmado el propio piloto asturiano.  Y no es de extrañar porque el Circuito de Sepang ha sido el escenario de algunos de sus éxitos más sobresalientes. Tanto es así que allí empezó su leyenda. En 2003 asombró al planeta motor marcando su primera pole position, por delante de un heptacampeón llamado Michael Schumacher. Aquella vuelta estratosférica, firmada con un Renault R23 inferior al de los rivales, demostró que tenía dinamita en las manos. Por cierto se convirtió en el poleman más joven con 21 años y 237 días. Para confirmar que lo del sábado no había sido de casualidad, obtuvo su primer podio al finalizar tercero en el GP de Malasia 2003. De este modo, pasó a la Historia del Automovilismo español, logrando lo que nadie había conseguido antes que él. Y eso solo fue el principio de las hazañas que estaban por llegar.

Alonso y Sepang, un idilio que termina este finde

 

Dos años más tarde, el 20 de marzo de 2005, se confirmó el ‘idilio’ entre Alonso y el trazado asiático. Solo tuvo que esperar a su segunda cita con el Renault R25 para llevarse su primer triunfo en Kuala Lumpur, el segundo de su carrera en la F1 tras Hungría 2003. Por cierto, aquello le catapultó al frente de la tabla y fue el pistoletazo de salida de los éxitos que ese curso culminarían con su primera corona.

Ya en 2007, con dos títulos en el bolsillo y sentado en el McLaren MP4/22, volvió a ganar en Sepang… (per) seguido por Lewis Hamilton. Del resto del curso, mejor no hablar.

 

Alonso y Sepang, un idilio que termina este finde

 

Para su tercera victoria en Malasia, probablemente la más épica e impresionante, hubo que esperar hasta la temporada de 2012, vestido de rojo. Su F2012 más que un Cavallino Rampante, parecía un pony renqueante. No había forma de meter aquel ‘hierro’ ingobernable en la trazada correcta. Sin embargo, la lluvia igualó las fuerzas y en esas situaciones delicadas donde cuentan más las manos que los caballos, el ovetense impartió una lección magistral.  Tanto es así que su ingeniero Andrea Stella le felicitó emocionado por la radio: “Es una de las más, más hermosas victorias, estamos muy orgullosos de ti y del equipo”.

Así ha sido el romance entre Fernando y Kuala Lumpur, un asfalto que junto a Hockenheim (Alemania) y Sakhir (Baréin), es donde más veces se ha subido a lo más alto del cajón. Pero como sucede con algunos idilios, este finde toca a su fin. Fué muuuuy bonito mientras duró.

 

Autor : Javi Prieto /  @Willyeforever

Imagen : McLaren F1 & Wikipedia