Tras años de estaticidad en la línea de pilotos de Ferrari, la escudería más laureada de la F1 nos brinda una de las atracciones más destacadas de la nueva temporada. Charles Leclerc ya no es un debutante, este año pilotará un “cavallino rampante” junto a Sebastian Vettel.

Y la joven estrella no piensa esconderse frente al tetracampeón. Su vertiginosa velocidad está a ojos de todo el mundo, y él es el primer consciente de su potencial. El plan es claro; dominar el SF90H y con él arrasar, incluído su compañero de equipo.

“Como es lógico, es mi objetivo adaptarme lo antes posible al coche y coger enseguida el ritmo. Pero soy realista al mismo tiempo, esta es mi segunda temporada en la Fórmula 1 y me queda mucho por aprender”.

“Tengo un largo camino por delante, pero estoy presionando para llegar a la primera carerra lo más preparado posible, y si Mattia Binotto se encuentra con un problema gestionando a dos pilotos rápidos, sería una buena señal para mí“, se sinceraba el monegasco.

Charles hablaba días después de que el nuevo jefe de los italianos, que sustituía a Maurizio Arrivabene a principios de enero, adelantara que en caso de disputa por el Campeonato, Vettel sería el primer candidato y favorecido por la Scuderia.

“Yo quiero centrarme en mí mismo, en tratar de mejorar cada vez que me siento en el coche. Ferrari es el equipo más grande, algo muy diferente a Sauber, mi anterior equipo, así que todo es una pequeña adaptación”, explicaba en declaraciones recogidas por Sky Sports.

“Seb es un chaval muy agradable, y no es nada difícil tratar con él, así que eso es bueno. En los boxes trabajamos en diferentes pruebas con el coche, y es bueno contar con Sebastian a mi lado durante estos días. Es bueno ver de cerca sus puntos fuertes y todo lo que puedo aprender de él“, finalizaba Charles.

 

Imágenes: @ScuderiaFerrari