Seguimos ahondando en la historia de la Scuderia y, hoy, el desgraining se convierte en un resumen de Ferrari en la F1 durante los años cincuenta.

La primera gran alegría

El sueño que desvelaba a Enzo Ferrari se convertiría en realidad el 14 de julio de 1951. Esta es la fecha histórica en donde una Ferrari cruza por delante de todos para hacerse con la cuadriculada. Casi como una ironía del destino, no sería ninguno de los pilotos de la península quien lograra esta hazaña. Ni Alberto Ascari (Ferrari Nº11); ni Luigi Villoresi (Ferrari Nº10); ni siquiera el inglés Peter Whitehead (Ferrari Nº14). El ganador resultaría un mocetón de la ciudad de Arrecifes, en Argentina. ¿Su nombre? Froilán González, y batiría al gran Juan Manuel Fangio por más de 50 segundos. Cuando el querido “Cabezón” llegó a los boxes, como ganador, logró algo más, ya que entró en la Gran Historia del Commendatore. Ferrari declaró al ver a su 375 ganadora:

“Cuando González dejó atrás a todo el equipo Alfa Romeo lloré, con una rara mezcla de alegría por el primer GP ganado por mi máquina, y dolor por que el vencido era Alfa Romeo. Era como si hubiese matado a mi madre”.

La Fórmula 2 manda en la Fórmula 1

Casi no hubo tiempo de espera. Con el amanecer de 1952 y por la falta de automóviles de F1, el campeonato aceptó, solo por un bienio, a los autos de F2. Esta reglamentación fue ‘kriptonita’ para Alfa Romeo, quien decidió alejarse de la categoría. Ferrari tomó la posta y se volvió invencible. Sus primeros títulos llegaron de la mano de Alberto Ascari.

Alberto Ascari, hijo de Antonio -el héroe de Alfa P2-, se convirtió en una constante al tope de los podios. Entre 1952 y 1953, Alberto ganó la friolera de 11 carreras sobre un total de 17. Fue durante esa racha en la que por primera y única vez intentaron las aventuras de las 500 Millas de Indianápolis. No ganaron. Sin embargo, la maniobra que realizó para que el bandazo sufrido por su Ferrari se convirtiese solo en un abandono mostró la tranquilidad y calidad conductiva del piloto italiano. Esta aventura quedó en la historia.

Lancia, Ferrari y Fangio, el triunvirato de la gloria

El primer campeonato de F1, el campeonato real con impulsores de 2500cm3, llegaría a Maranello en 1956. La sesión de Lancia a Ferrari de sus monoplazas y el contrato del argentino Juan Manuel Fangio dieron como resultado el título mundial. Este sería seguido dos años después gracias a la regularidad del inglés Michael Hawthorne. Michael batió a su compatriota Stirling Moss por solo un punto y tres victorias menos que el genial Stirling.

Trágico 1958

Este campeonato fue una de las temporadas más duras que debió vivir Don Enzo (ya se lo puede llamar así). Casi como ocurriría 24 años más tarde, Ferrari perdió muchos y grandes nombres. El primero en pagar el tributo a la velocidad con su vida fue Luigi Musso. El italiano se mató disputando el GP de Francia, la mismísima carrera en que se retiraba el Quíntuple. Dos carreras después, en el Infierno Verde, Peter Collins sufría el mismo destino al perseguir a Tony Brooks y su Vanwall.

Sin afectar al campeonato, y luego de su retiro a los 30 años, fallecía en un accidente de tránsito el campeón Michael ‘Mike’ Hawthorne. Estas desgracias, más la sumada por Alberto Ascari en 1955, pusieron en la mira de la prensa al Commendatore. La guerra entre ambas facciones, Don Enzo y la prensa italiana, ya estaba declarada.

Ferrari no habló inglés en 1959

Para 1959, la avanzada británica era una realidad: Cooper y Lotus así lo indicaban. A los ágiles bólidos ingleses de motor trasero, el Commendatore, tozudamente los seguía enfrentando con el motor adelante. En medio de este cambio de paradigma, Ferrari tuvo que faltar por tercera vez a una carrera. Casi por casualidad ésta fue el GP de Gran Bretaña y la causa resultó la huelga en Italia que le impidió viajar a todo el equipo.

En la próxima entrega ya nos adentramos en la década del ’60, donde hay grandes cambios en Ferrari.

 

Imágenes: Ferrari

Fuentes:

  • Hayhoe, D. Formula 1 The Knowledge, Second edition. Veloce Publishing. 2019.
  • Deschenaux, J. Gran Prix Guide 1950-1999.
  • Enciclopedia SALVAT del AUTOMÓVIL – Fascículos 5 (pp 294 a 320 ) y 6 (1 a 3).