Hamilton vence otra carrera sin que su compañero Bottas ni Verstappen en su Red Bull puedan plantarle batalla.

Antes del inicio de la carrera, ya aconteció el primer abandono. Y es que en la vuelta de instalación hacia la parrilla de salida, del McLaren de Carlos Sainz comenzó a salir un poco de humo que hizo saltar todas las alarmas. El madrileño se dirigió a los boxes, pero el problema mecánico, generado en la unidad de potencia y derivado hasta los escapes, le impidió tomar la salida. Tras ello se sucedieron dos minutos de silencio, el primero como denuncia contra el racismo y el segundo, en memoria de Anthoine Hubert, y el himno de Bélgica; hasta que a las 15:10 horas por fin se apagaron los semáforos.

La salida ha acontencido sin incidentes, con todos los coches de cabeza saliendo bien y Bottas sin atacar a Hamilton. A la salida del Raidillon Verstappen estaba anclado a la caja de cambios del Mercedes de Bottas, pero al no poder adelantarlo permitió a Ricciardo que se le emparejara. El Renault y el Red Bull permanecieron en paralelo durante varias curvas a partir de Les Combes, ganando la partida el neerlandés. Más atrás, Leclerc subió hasta el décimo puesto, saliendo decimocuarto, y Ocon adelantó a Albon por el quinto puesto. Al inicio de la segunda vuelta, Hamilton corría ya destacado, delante de un Bottas muy blando.

La carrera se estabilizó en las primeras vueltas, con los dos Mercedes liderando y los dos Renault, con Ricciardo a la cabeza, separando los Red Bull de Verstappen rodando en tercera posición y Albon, en sexta. Detrás de Leclerc, con grandes dificultades en pista, se formó un pequeño tren hasta que Norris lo sobrepasó en la sexta vuelta y Kvyat en la siguiente, ambos empleando el DRS en la recta de Kemmel. Los Ferrari rodaban al ritmo de los Alfa Romeo, de quienes no lograban despegarse. A partir de la octava vuelta Gasly alcanzó a Stroll, impidiendo el canadiense que lo adelantase valiéndose de una agresiva defensa en frenada.

Coche de seguridad en la vuelta 10

En cabeza, Hamilton guiaba la carrera con parsimonia, manteniendo a Bottas en torno a los dos segundos. También dejando que Verstappen fuese distanciándose poco a poco, ya a seis segundos en la vuelta diez, cuando se desplegó un coche de seguridad tras un aparatoso accidente involucrando al Williams de Russell y al Alfa Romeo de Giovinazzi entre las curvas 13 y 14. El italiano perdió el control de su monoplaza y el británico se lo llevó puesto, destrozando ambos coches y esparciendo mucho debris por la pista. Ambos ilesos, por fortuna.

Todos los pilotos pararon el boxes excepto Gasly y Pérez, que se situaron cuarto y quinto, respectivamente. Casi todos con neumático duro, con intención de trazar las 32 curvas restantes y evitar otra parada en boxes. Cuatro vueltas después de entrar, el coche de seguridad volvió a su garaje y se reanudó la acción. En la relanzada Hamilton pudo volver a escaparse de Bottas,  Albon adelantó a Ocon y Raikkonen hizo lo propio con Vettel al final de Kemmel.

En las vueltas sucesivas los tres de cabeza recuperaron la situación previa, aunque con Verstappen más cerca de Bottas, a quien advirtieron por radio que «el stint va a ser largo». Mientras Ricciardo sobrepasó a Checo en la vuelta 17, aprovechando la gran velocidad que los Renault están mostrando este fin de semana en las Ardenas. También Albon superó al mexicano al término de esa vuelta, en la chicana de la parada del autobús. Racing Point se equivocó al no parar en boxes a Pérez durante el Safety Car. El mexicano hubo de hacer su cambio de neumáticos en la vuelta 19, colocándose al final del pelotón, todavía agrupado. Mientras, los dos Ferrari batallaban por el duodécimo puesto, con Leclerc siendo más respetuoso con su compañero que en anteriores fatídicas ocasiones y sin poder superarlo.

Ricciardo seguía siendo el más rápido de la zona media de la tabla, robándole a Gasly el cuarto lugar en la vuelta 21. El francés llevaba neumáticos diez vueltas más gastados que el resto, rodaba aún con los neumáticos con los que inició la carrera. A Gasly le adelantó también Albon pocos giros después, con el tailandés ya centrado en alcanzar a Ricciardo. Al mismo tiempo se libraba una batalla por el undécimo lugar, con Raikkonen precediendo a Vettel y a Leclerc. Los tres rodando muy juntos hasta que el monegasco realizó otra parada en boxes. En cabeza, Verstappen comenzaba a arañar décimas de Bottas y a rondar su zona de DRS, con el finlandés ya descolgándose de Hamilton.

Superado el ecuador de la carrera, Pierre Gasly continuó perdiendo posiciones, siendo adelantado también por Ocon. El de AlphaTauri no podía extraerle más rendimiento a su montura y realizó su cambio de neumáticos. Esto lo relegó hasta el decimosexto lugar, únicamente por delante de Leclerc. Vettel, por su parte, siguió trabajando de estratega además de como piloto. El alemán sugirió por radio parar pronto en boxes para intentar un undercut a los pilotos que tenía de delante, a los que no podía superar. Por su parte, Gasly y Pérez comenzaban a remontar, con la esperanza de que el resto de coches tuviesen que hacer un cambio extra de neumáticos.

El final de la carrera y la victoria de Hamilton

A falta de diez vueltas para el final, Hamilton rodaba cómodo a casi cinco segundos de Bottas. Tras él, Verstappen clamaba por radio sus dificultades para llegar hasta el final con ese juego de neumáticos. En lucha por las últimas posiciones de puntos, Pérez se deshizo de los dos AlphaTauri para colocarse noveno y su compañero Stroll atacaba a Norris por el séptimo lugar. Ya en la vuelta 39 los pilotos se dedicaban a cuidar los neumáticos, con Bottas recibiendo el mensaje por radio de evitar pisar los pianos. Por su parte, Ocon se acercó a Albon y los Racing Point empezaron a perder rendimiento, con Norris alejándose de Stroll y aproximándose a Ocon y Pérez perdiendo el puesto con Gasly.

Ya en la última vuelta Ocon se quitó de encima a Albon, que hubo de preocuparse entonces de cerrar a Norris. Sobreponiéndose a sus problemas de neumáticos, Lewis Hamilton cruzó la línea de meta en primer lugar tras liderar todas las vueltas. Y, sin permitir que un Bottas desaparecido en todo el fin de semana le opusiese resistencia. Mención de honor para Ricciardo, que se llevó la vuelta rápida y terminó a tan solo tres segundos del podio, a cuyo último lugar se aupó Max Verstappen. El rendimiento de Renault ha sido fenomenal este fin de semana. La marca francesa tiene coche que se adapta muy bien a los circuitos de alta velocidad como este, y el australiano ha estado muy acertado.

En el lado negativo, el rendimiento de Ferrari ha sido penoso. Vettel ha cruzado la meta en decimotercer lugar y Leclerc, en decimoquinto; sin poder siquiera luchar contra el Alfa Romeo de Raikkonen. En Maranello tienen pesadillas con la carrera de Monza, que acogerá el GP de Italia este próximo fin de semana.

 

Imagen: Fórmula 1