Segunda carrera del campeonato 2018, y desde Ferrari la afrontan como líderes en ambas clasificaciones: tanto la de pilotos con Sebastian Vettel, como en la de constructores, gracias a la victoria del alemán  y el tercer puesto de Kimi en Albert Park.

Sakhir es un circuito muy nuevo en comparación con otros presentes en el calendario, y es que su debut en la categoría reina del automovilismo se remonta al año 2004, cuando el vencedor fue precisamente un Ferrari, el de Michael Schumacher.

Trazado talismán para los de Maranello, donde han conseguido 5 victorias de las 13 ediciones. Además de 6 segundos puestos y un tercero, lo que hace un total de 12 podios para los italianos, casi un podio por participación.

Será en el Reino de Bahrein donde Sebastian comenzará su Gran Premio número 61 con la Scudería, buscando el número redondo de victorias con el mono rojo, después de haber conseguido la novena en tierras australianas.

Las mismas victorias tiene Räikkönen en su palmarés con Ferrari, eso sí, con más del doble de participaciones que el tetracampeón, un total de 131. Puede presumir, aun así, de haber sido campeón bajo el logo del ‘Cavallino’, algo que su compañero no puede reconocer por el momento.

Los compuestos elegidos por Pirelli para esta segunda cita del calendario son los medios, los blandos y los superblandos como opción más rápida. Ambos pilotos han escogido la misma cantidad de juegos para cada compuesto: 2 del medio, 4 del blando y los 7 restantes del superblando, para una carrera que se prevé a dos paradas por el asfalto abrasivo que tiene el trazado.

Pese a que el circuito sea favorable para Ferrari, no se pueden confiar con los Mercedes. Después del error de estrategia en Melbourne, desde Brackley no se van a volver a permitir un fallo de tal calibre, por lo que la lucha por ser el más rápido del fin de semana será de lo más apretada.

 

Imagen: Scuderia Ferrari