A finales del pasado año, conocimos los planes que tenía Liberty Media para la revolución que esperan en 2021. La firma estadounidense, propietaria de la Fórmula 1 desde 2016, tenía en mente una simplificación del reglamento de cara a dicho año, hecho que provocaría un mayor interés para la entrada de nuevos fabricantes.

Todo parecía estar listo para la salida de un nuevo reglamento técnico, pero la opinión de los equipos cambió drásticamente en los últimos meses, debido a que no ven necesario la modificación de los motores.

“Tuvimos una presentación que habría significado rediseñar el motor. Los cuatro fabricantes entendemos que quizás necesitamos algo más de ruido y hablar del consumo de combustible, que es importante”, reconocía Toto Wolff después de la reunión.

Los cuatro fabricantes que forman la F1 (Renault, Mercedes, Ferrari y Honda), no ven necesario la eliminación del MGU-H si no entra ningún fabricante más al Gran Circo. No sería lógico cambiar lo que las fábricas tienen ya hecho.

Rediseñar el motor sin que entre nadie no tiene mucho sentido, así que si alguien se compromete a venir a la F1 de la forma que nos hemos comprometido nosotros: pasando por altibajos, con la inversión que requiere… Entonces vamos a poder hablar de reglas de motor, pero si no entra nadie, es una conversación académica“, ha añadido el alemán para finalizar.

¿Que cambiaría entonces?

En lo que sí estarían de acuerdo los fabricantes, es en hacer pequeños cambios como el incremento del sonido del motor, en ajustar los niveles de combustible o en estandarizar ciertas piezas de las unidades de potencia, pero nada más lejos de eso.

Liberty Media y la FIA tendrán que seguir negociando y hablando con todos los motoristas para llegar a un acuerdo acorde con todos, tal y como aseguró Christian Horner: “Creo que definitivamente el aparato de gobierno y el propietario de los derechos comerciales tienen que hacer lo que crean que es adecuado para el deporte”.

 

Imagen: F1