El sexto día de los test de Fórmula 1 no ha sido productivo para Ferrari, incluso, a pesar de los esfuerzos puestos en ello: el plan era que Sebastian Vettel condujera el SF90 por la mañana y Charles Leclerc por la tarde, pero el piloto alemán sufrió un incidente durante la jornada matinal que alejó todas las opciones de rodar en el asfalto de Montmeló.

En este sentido, Vettel salió a la pista sobre las 9:00 de la mañana y, justo cuando se encontraba probando el coche en diferentes configuraciones, un problema mecánico hizo que el de la escuadra roja se precipitara fuera de pista en la curva 3. Fue entonces cuando Sebs fue trasladado al centro médico del propio circuito aunque, para su suerte, resultó totalmente ileso. El de Alemania completó 40 vueltas, con un mejor tiempo de 1’18 “195 pero dándole, eso si, el relevo a su compañero de equipo.

“No sabemos mucho más que todo el mundo”, dijo Vettel. “Estaba entrando en la curva tres y, por la sensación que tuve dentro del coche, hubo un problema con la suspensión delantera izquierda y a partir de ahí no había nada que pudiera hacer para evitar chocarme, porque no dependía de mí, perdí totalmente el control”.

Asimismo, añadió: “Me fui más o menos recto contra el muro. Hemos intentado hacer todo para comprenderlo. Sería más fácil si la escapatoria hubiera sido más grande y el coche no hubiera chocado contra nada, porque ahora hay daños que se deben al impacto. Es en lo que vamos a trabajar”, concluyó.

Aunque eso sí, se mostró algo más positivo en relación con las anteriores jornadas: “Todavía diría que estoy sintiendo una sensación positiva con el coche. La semana pasada si que fue productivo ya que hicimos más”, sentenció. Por su parte, Leclerc retomará la acción y se pondrá al volante del monoplaza mañana, antes de, eso sí, pasarle el relevo a Vettel.