Renault resuelve satisfactoriamente el GP de Australia con la séptima plaza final de Nico Hulkenberg y con Carlos Sainz cerrando el top diez. La carrera de la dupla de Renault tuvo varias fases. Tras una sorprendente salida sin sobresaltos, la fila formada se convirtió en una marcha rítmica que nos dio la oportunidad de diferenciar el potencial de cada equipo. En este caso, la rivalidad entre Renault y Mclaren se hacía patente. Los de Woking se situaban justo por detrás aunque con el cuchillo entre los dientes.

Fernando Alonso trataba de ganar la posición a su compatriota en Renault, pero sin éxito. La presión del asturiano tuvo su efecto en la vuelta 22, cuando el madrileño cometió un error en frenada debiendo reconducir a pista tras irse a la hierba. Previamente, Hulkenberg ya había perdido posición con Ricciardo. Sin embargo, la vista estaba puesta en Max Verstappen. El holandés se ceñía en ganar la posición a unos Haas imparables.

Renault resuelve satisfactoriamente el GP de Australia

Lo único que pudo frenar a los americanos fue la mala fortuna. Llegadas las paradas (con una estrategia común más que previsible una vez más), una de las pistolas fallaba dejando sin posibilidad de continuar primero a Magnussen y después a Romain Grosjean. Banderas amarillas en el primer sector con el coche del danés bien aparcado en la escapatoria, y VSC cuando el francés no tuvo la posibilidad de llegar al mismo punto que su compañero.

En este momento, Carlos Sainz ya había su cambio de gomas. El blando turnaba al ultra blando inicial, al igual que Hulkenberg. Sin embargo, éste realizó su parada dos vueltas más tarde anterior al despliegue del Virtual Safety Car. Ésto fue aprovechado convenientemente por Mclaren, quienes metieron a Fernando Alonso en este periodo. La ventaja tomada de esta situación fue cuantiosa, el piloto español ganaba definitivamente la posición a Hulkenberg y a Verstappen.

Tras este lapso bajo el mencionado régimen de VSC, el Safety Car salió agrupando a todos los pelotones ya formados en aquella fase de ritmos que se había acentuado con las paradas. Esta decisión cambiaba en cierta forma el panorama para Renault, puesto que iban a tener la ocasión de pelear por aquello que se había perdido. Sobre todo en el caso de Carlos Sainz, que ahora iba a tener que lidiar con Checo Pérez por los primeros puntos junto con Valtteri Bottas viniendo desde atrás.

De nuevo, la carrera se torna en fila con los pilotos debiendo de sacar ritmo tanto para defenderse como para atacar. En el primer frente Hulkenberg estaba en la estela de Verstappen y Alonso, con el piloto de Red Bull en plena persecución del piloto de Mclaren. Por detrás Bottas daba buena cuenta de todos cuanto pudo aunque ya se le agotaba el tiempo puesto que ya superamos la treintena de vueltas.

Renault resuelve satisfactoriamente el GP de Australia

En estos momentos, Sainz reportaba por radio nauseas. Malestares que empeoraron su ritmo dando a Pérez alas para llegar. A su vez, Hulkenberg no podía unirse a Verstappen por la caza de Alonso finalizando de tal manera:

“Deberíamos estar bastante contentos con el día de hoy. El ritmo del coche fue competitivo, pero sabemos que aún queda mucho trabajo por hacer. Estoy feliz con la manera en la que el fin de semana ha progresado. El viernes no fue muy bien para mí, pero lo hemos transformado en un resultado decente y en un satisfactorio domingo. Tuvimos suerte con los abandonos, pero infortunio con el safety car, pero esto son carreras y llevarse seis puntos a casa es simplemente una recompensa para el equipo por el duro trabajo”, resume Hulkenberg.

“Un comienzo positivo para el equipo y estoy muy contento con el rendimiento del coche. Es un buen trabajo llevarse a casa un buen puñado de puntos y tener algo como base para Baréin. Personalmente, tuve problemas con la botella de bebida, el resultado fue sentirme muy indispuesto. El primer stint fue también un poco difícil con mucho sobreviraje en el coche, especialmente con el viento que hacía. Seguimos aprendiendo y pondremos el trabajo en Baréin”, expresa Sainz.

“Es un resultado satosfactorio, no perfecto, pero muestra que estamos en la línea de nuestros objetivos realizando progresos. Claramente, para un buen resultado, todo tiene que ir bien, desde las paradas hasta la fiabilidad y este doble top diez ilustra un inicio sólido de la temporada. Estamos contentos con el día de hoy y el resultado nos da algo sobre lo que construir. En carrera, el safety car nos dañó un poco, pero esto son carreras y a veces estas cosas te benefician. Nuestra meta sobre la fiabilidad ha sido reflejada con todos los coches motorizados por Renault acabando entre los diez primeros hoy, lo cual es bien positivo. Sabemos que va a estar bien apretado en la zona media, y eso nos motiva para continuar trabajando duro”, concluye Abiteboul.

 

Imágenes: Renault Sport F1