Noticias más positivas en la motorista francesa que las que se originaban hace unas semanas. Presentaban en pretemporada una unidad de poder con carencias y sin desarrollar, principalmente por los errores originados en el sistema de recuperación de energía. Como resultado, Renault y el resto de equipos clientes tuvieron que hacer uso de la versión del 2016, que supuso en el vehículo un incremento de 5 kilogramos y hasta 1 litro de aire extra necesario para refrigerar.

Desde entonces, los motoristas trabajan sin descanso para hacer uso del nuevo y crucial componente en una de las próximas citas del Mundial, que por ahora sería Rusia.

Cyril Abiteboul, director general de la escudería francesa habló de la situación de la unidad de potencia en una entrevista para Autosport. “Estamos planeando introducirlo tan pronto como sea posible, la potencia que puede entregar el MGU-K está regulada en 120KW, lo cual no podemos superar, y supone un peso en la refrigeración y el funcionamiento (la versión anterior). Todo el sistema fue mejorado este año pero no es tan fácil. Tenemos libertad en el uso de los componentes para el motor, así que tenemos espacio para desarrollarlo. Trataremos de introducirlo lo antes posible”, repetía una vez más el director del conjunto de Enstone.

Por ahora la consigna del motorista es la tranquilidad, asegurarse el trabajo bien hecho y la competitividad de sus clientes y de su equipo oficial hasta que la nueva pieza sea montada: “Lo vamos a afrontar de la manera más sencilla posible”, aseguraba Abiteboul. Según rumores, sería en el cuarto Gran Premio, en Sochi.

Una esperanza sin duda para los equipos que montan los motores franceses, que se estaban preparando para un desarrollo lento, algunos como Red Bull reconocían que las luchas por la victoria podrían ser cosa de las últimas citas del calendario. Habrá que ver cómo se comporta la versión anticuada en las rectas de China.

 

Autor del artículo: Alejandro Valencia/@alexwhiteflag

Fotos: Renault F1 Team