Quien nos iba a decir que en unos entrenamientos libres 1, después de unas largas vacaciones, y en el circuito más largo del calendario, tuviéramos una diferencia de 53 milésimas entre el primero y el segundo clasificado.

Obviamente no tiene validez por las circunstancias, ya sean neumáticos, pruebas aerodinámicas, etc, etc. Pero nos indica que en cualquier momento, una mínima distracción puede cambiarlo todo esta temporada, por lo que cada momento en pista vale oro.

Empezaba la sesión sin aparentes problemas, hasta que la radio de Alonso se activaba y se le oía decir: ‘No power’. Por suerte ha sido un problema menor y solucionado rápidamente, así que no ha perdido mucho tiempo, y lo que es más importante, otro motor.

También hemos visto a un recuperado Felipe Massa, que recordemos se perdió la carrera en Hungría porque sufría vértigos. La alegría ha durado poco. Al inicio del segundo sector, el brasileño perdía el coche y lo chocaba contra el muro, haciéndole imposible volver a rodar en este sesión.

Mientras tanto, veíamos los constantes récords y mejoras de tiempo, que se sitúan solamente a un segundo del récord absoluto de la pista, con todo el fin de semana por delante. Mercedes rodaba muy bien con los blandos; Ferrari, con los ultrablandos muy cerca de los alemanes, todavía nos queda ver el ritmo real de cada una de las escuadras.

Un choque leve de Bottas y un problema pasajero con el DRS del MCL32 de Fernando Alonso, serían los únicos incidentes en lo que restaba de sesión.

Finalmente, mejor tiempo para Räikkönen, detrás Hamilton y tercero Vettel. Sorprende la gran actuación de Carlos Sainz, en 7ª posición y un discreto 13er puesto para Alonso.

 

Autor del artículo: Jorge Solana/@jorgeqeaf1

Fotos: @F1