Todo ciclo tiene un fin y la relación Red Bull-Honda puede que esté cerca de terminar. La relación escudería-motorista empezó en la temporada 2019 aunque en el año anterior Honda ya estuvo con Toro Rosso aprovechando el equipo B como banco de pruebas.

Una relación fructífera con 2 campeonatos y 1 subcampeonato pero que no pasa por su mejor momento ya que los nipones “abandonaron” el proyecto en 2022. Adrian Newey ha dado su opinión sobre la situación en la que les dejó este acontecimiento: “Es una situación tensa que tiene una historia detrás”.

A pesar de ello siguen dando soporte y se han inscrito en la lista de motoristas para la nueva reglamentación, por lo que en realidad nunca se han ido.

“Al mismo tiempo, para salvaguardar el futuro, establecimos nuestra propia planta de motores, que es de vanguardia con los últimos bancos de pruebas e instrumentos de mediación. Tenemos el mismo compromiso de Honda en Sakura”.

Que Honda quiera volver le da un abanico de opciones interesante a Red Bull porque la escudería lleva montando su propia sección de motores desde el anuncio del abandono de la marca nipona. También se ha hablado de la posibilidad de Ford y en su momento se descartó la de Porsche. Adrian Newey también se ha pronunciado sobre esto: “Cuando se trataba de decidir quién haría qué a partir de 2026, algunas cosas se pusieron difíciles. Se planteó que Honda sólo hiciese la parte eléctrica, pero no pudimos llegar a un acuerdo”.

 

Autor: Óscar Talavera

Imagen: XPB IMAGES