Tras descubrirse un supuesto pacto secreto entre Ferrari y la FIA en el que la FIA permitía a los italianos irse de rositas si cambiaban las irregularidades de su motor, una serie de equipos, que fueron todos exceptuando los italianos y sus equipos cliente, Haas y Alfa Romeo, firmaron un documento donde se pedían explicaciones sobre lo sucedido y amenazaban con extender la denuncia incluso hasta la justicia ordinaria en caso de que lo creyeran oportuno.

“Declaramos públicamente nuestro compromiso de buscar una explicación a lo ocurrido en este asunto. Principalmente para asegurarnos de que nos encontramos frente a una competición que asegura la equitatividad. Asimismo, la igualdad de trato entre todos los equipos que conforman la parrilla. Lo hacemos no solo por nosotros sino por los participantes, los fans y los accionistas de la categoría”.

El equipo Mercedes había sido uno de los que habían propuesto la iniciativa. De hecho, Toto Wolff se mostró muy beligerante con la FIA al respecto, pero finalmente han decidido desmarcarse del acuerdo firmado.

Según el portal Motorsport.com, supuestamente este medio habría recibido una información que aseguraría que el equipo Mercedes habría recibido presiones de sus socios de Daimler para que se retirara de dicho acuerdo. La intención sería la de evitar dañar la imagen de la Fórmula 1 y también la del propio equipo.

Jean Todt también publicó una carta al respecto del asunto mostrando públicamente su enfado días después de que se publicara la carta en forma de queja de los 7 equipos, lo que podría haber influido a que los altos cargos de Mercedes hubieran recomendado a Toto Wolff echarse a un lado en esta batalla para evitar males mayores.

 

Autor del artículo: Daniel Ballarín

Imagen: Mercedes AMG F1