El inicio de la temporada de la Scuderia Ferrari ha sido casi inmejorable: una pole, un doblete y un segundo y tercer puesto en las dos primeras carreras, y liderando ambos mundiales. El F1-75 es un coche rápido, pero en un año de normativa nueva como este es tan importante tener un buen monoplaza al comienzo como ir introduciendo mejoras para mantenerse arriba.

De ello es consciente Mattia Binotto, el director del equipo. «Cuando hay dos coches tan igualados como están el de Ferrari y el de Red Bull, cada evolución introducida será clave porque las décimas que se puedan ir restando harán la diferencia», ha declarado el italiano. Sin embargo, asegura que no hay que tener demasiada prisa y que solo introducirán mejoras cuando puedan asegurar que serán positivas. Asimismo, Binotto se muestra celoso respecto al techo presupuestario: «insisto cada día a la FIA para que lo comprueben, porque si no puede distorsionarse la competición final», asegura.

En respuesta a ello, el director técnico de la FIA Nikolas Tombazis –ex de McLaren, Ferrari y Manor– ha comentado que «el objetivo es garantizar que la lucha sea limpia y que el campeonato lo gane quien lo merezca». El ateniense ha explicado que «el límite de gasto hace que los controles sean más complejos, porque hay que examinar lo que cada equipo hace en su fábrica». Tratando de tranquilizar al jefe de la Scuderia, cuenta que «tenemos un equipo muy capacitado para llevar a cabo los controles financieros, con Federico Lodi a la cabeza. Mattia puede quedarse tranquilo porque trabajamos con todo para mantener el control, hasta con expertos en materia fiscal que realizan seguimiento a los balances de los equipos».

 

Imagen: Scuderia Ferrari