El proovedor oficial de neumáticos de la Fórmula 1, Pirelli, llega a su Gran Premio de casa, el de Italia, con una nueva interrogante en cuanto a sus neumáticos: las vibraciones aparecidas en las ruedas traseras a la salida de curvas de poca velocidad durante la pasada cita belga. El hombre que encabeza el proyecto es Mario Isola, quien ha explicado que se están dedicando a fondo a este problema en su fábrica milanesa para solucionar el contratiempo antes del GP de Italia, ya que el Autodromo Nazionale di Monza cuenta con curvas como la primera chicane que se ajustan al perfil de aquellas en las que aparece este comportamiento.

Según parece, estas vibraciones suceden en las bandas de rodadura a la salida de curvas lentas, momento en el que se requiere mucha tracción. “Estamos comprobando la frecuencia de las vibraciones y continuamos nuestra investigación”, ha comentado Isola. El efecto es parecido al que ya apareció en las paredes laterales de las gomas, ha puntualizado. “Puede suceder porque hay una gran frenada y gran tracción en la salida de las chicanes de baja velocidad. Pero también tenemos que entender el efecto del agarre y la aspereza del asfalto. No estoy seguro de que tengamos lo mismo en Monza”, ha explicado el italiano.

Por ejemplo, el canadiense Lance Stroll se vio perjudicado en su vuelta de clasificación por las dichas vibraciones, sin embargo, no hacen peligrar el neumático en sí. Durante el Gran Premio de Bélgica, Pirelli habló con los equipos, ya que fue donde se acentuó el problema. No fue una situación grave aunque decidieron estudiar el porqué del fallo, sin obtener todavía conclusiones. “Tenemos que seguir investigando y comprobando”, ha concluido Mario Isola.

 

Autor del artículo: Alberto Pacios/@albertomclatas

Fotos: Pirelli – @F1