Cuando el equipo McLaren anunció que decidía no disputar el Gran Premio de Australia debido a que uno de sus miembros había dado positivo en la prueba del coronavirus, la incertidumbre se instaló sobre el paddock de la Fórmula 1. Aunque se daba por hecho que la carrera finalmente no se iba a celebrar, la confirmación no llegó hasta 2 horas antes de que comenzaran los entrenamientos libres, con lo que varios pilotos -entre ellos Grosjean- se vieron envueltos en un clima de total confusión.

Romain Grosjean, piloto de Haas F1 Team

El piloto francés ha concedido una entrevista al fotógrafo australiano Kym Illman, en la que ha explicado su experiencia al respecto. Según Romain, comenzó a oír rumores sobre la cancelación del evento el jueves por la tarde:

“Los primeros rumores que oí al respecto fueron el jueves por la tarde. Como estaba nervioso debido a la incertidumbre, no pude dormir bien esa noche”, asegura el francés.

Entonces, viendo que le costaba conciliar el sueño, decidió enviarle un mensaje por WhatsApp a Sebastian Vettel, quien le comentó que la carrera se iba a suspender y que el equipo le había dicho que podía ir ya para el aeropuerto:

“Como no podía dormir decidí enviar un mensaje a Sebastian para ver si estaba también despierto. Fue una sorpresa que sí que lo estaba. Me dijo que iba camino del aeropuerto, que la carrera se cancelaba y que el equipo le había dicho que podía ir ya hacia el aeropuerto. Ahí es cuando vi que había algo que empezaba a ir mal de verdad”.

La carrera de Australia en principio ha sido cancelada y no pospuesta, pero los organizadores de la prueba han asegurado que intentarán volver a recolocar la prueba en otra fecha. De hecho, sería un gran premio fácil de recuperar en cuanto a fecha se refiere ya que en diciembre en Australia se encuentran en pleno verano y no sería la primera vez que una prueba en el país “aussie” cierra el campeonato.

 

Autor del artículo: Daniel Ballarín

Imagen: Haas F1 Team