Finalmente llegaron los test de pretemporada y, con los autos y liveries ya presentados, podemos centrarnos en ver los monoplazas en acción y cómo avanzaron en su desarrollo de un año a otro. Asimismo, no hay duda de que uno de los protagonistas inevitables es el coche de la escudería campeona, el W11, en manos de Hamilton y Bottas.

James Alison, director técnico de Mercedes

El directivo comunicó que el monoplaza del año 2020 es un desarrollo que se basó en el W10, aplicando cambios en el rendimiento y la aerodinámica.

“Queríamos cambiar aspectos del concepto del monoplaza, aspectos que serían completamente imposibles de cambiar durante una temporada, para tener una base con la que poder trabajar más durante el nuevo campeonato”.

Con respecto a esto, se entiende que muchos de los cambios supondrían penalizaciones en 2019. A su vez, resaltó la tranquilidad que supone tener las reglas claras desde principio de año, a diferencia del 2019, ya que el reglamento se concluyó mientras se desarrollaban los test en Barcelona.

“El año pasado, las reglas cambiaron bastante, y se concluyeron relativamente tarde. En esas circunstancias, hacer un monoplaza para el estreno y otro para la segunda semana de test nos dio la oportunidad de lograr el mayor aprendizaje para el auto de la primera carrera”.

Sin embargo, al ya contar con el reglamento concluido de este año, Alison sostiene que:

“Con un reglamento más estable este año, y con el desarrollo inicial de 2020 que está ya al mismo nivel que el coche con el que acabamos 2019, repetir esa táctica del año pasado no tendría sentido”.

En definitiva, el W11 que veremos en los test será el mismo que verá cómo se apagan los cinco semáforos en el circuito de Melbourne. Sabiendo esto, en los test del año pasado, ¿Ferrari fue más rápido o Mercedes tenía un desarrollo distinto del coche? ¿O será que brindaron información confusa para despistar y sorprender en la pista?

 

Autor del artículo: Julian Serdeiro

Imagen: @Mercedesamgf1