Pat Symonds, director técnico de la F1 y ex integrante de equipos como Toleman, Benetton, Renault, Marussia o Williams; ha revisado la adaptación del nuevo reglamento a las carreras en una entrevista para Auto Motor und Sport.. La reglamentación aerodinámica revolucionaria para 2022 ha funcionado en su principal objetivo, los monoplazas pueden seguirse cerca sin perder una gran carga aerodinámica.

“Creo que hemos mejorado la competición. Medimos lo bien que los pilotos pueden seguir a otro coche en un área de 200 metros y nos fijamos en las posibilidades de adelantamiento que hay. Eso ha mejorado mucho, aunque no se trata tanto de cifras de adelantamientos puros, que incluso fueron menores a las de 2021 en algunos circuitos”.

“Se trata de la fase anterior, buscamos el duelo que arrastra al espectador, la maniobra de adelantamiento es sólo el final de la batalla. Estamos contentos con el resultado, lo más importante era mejorar la calidad de las luchas y permitir al piloto poder seguir más de cerca del coche de delante“.

Pero la nueva reglamentación ha tenido tres grandes inconvenientes. El problema más importante y que los equipos y la FIA han ido solucionando a lo largo de la temporada es el porpoising.

“Creo que en la FIA exageraron un poco con el ‘porpoising’ después de Bakú. Allí vimos los peores efectos porque un equipo intentó algo que no funcionó y luego, lo hizo público con bastante estrépito. Si la gente no hubiese intervenido, los problemas se habrían resuelto igualmente. La mayoría de equipos ya saben como controlar el rebote“.

El director técnico de la F1 repasa el rendimiento de la nueva reglamentación

“Admito que era algo que tampoco estaba en nuestro radar, pero que deberíamos haberlo tenido. Tuvimos la posibilidad de descubrirlo y yo también tendría que saberlo por haber trabajado en coches de efecto suelo. Todos tuvieron que resolver este problema antes de trabajar en la aerodinámica y el rebote no es puramente aerodinámico, también intervienen otros factores como la rigidez de la suspensión“.

Otro problema que, en realidad ya existía en los coches de 2021 pero que se ha agravado, es la cortina de agua que desprenden los monoplazas en condiciones de lluvia. Y, el último gran inconveniente, es la falta de igualdad entre equipos. La brecha sigue siendo bastante grande y los tres equipos de siempre siguen liderando la competición con puño de hierro igual o más que los años anteriores.

“Debo dar la razón en que no ha funcionado el objetivo de igualar la parrilla. Hemos subestimado que algunos equipos siguen teniendo grandes departamentos de aerodinámica, que han sacado más partido de la nueva normativa. Eso sí, tenemos la esperanza de que la brecha se reduzca rápido, ya se ha podido ver en algunas carreras de 2022“.

 

Imagen: LAT Images