Haas ha desaprovechado una oportunidad única para puntuar en un caótico GP de Hungría. En una salida con la pista húmeda en la que el compuesto verde era la opción para los pilotos, un choque múltiple hizo aparecer la bandera roja. Durante unos minutos se detuvo la carrera para sacar los restos de los coches implicados que concluyeron con el abandono de cinco pilotos. Haas no se vio implicado y ambos pudieron reanudar el GP.

Mick subió hasta el top ten tras pasar por boxes para colocar los slicks en una pista cada vez más seca, en la que los intermedios no tenían sentido. Nikita hizo lo mismo pero en el pit lane sufrió un golpe con Raikkonen con daños en la suspensión. El piloto de Haas se vio obligado a retirarse y Kimi sufrió una sanción de 10 segundos por el incidente.

Schumacher no pudo mantenerse en el top ten tras el cambio de neumáticos en la vuelta 35, pero obtuvo su mejor resultado en F1, finalizando decimotercero.

Mick Schumacher (P13)

“Terminar delante de un Alfa Romeo y acabar decimotercero saliendo último es algo que no podíamos anticipar. Es un resultado  bastante decente para nosotros, pero  no tenemos un coche para esta posición, todo ha venido como consecuencia de las circunstancias”.

Nikita Mazepin (DNF)

“Es una carrera en la que me siento a gusto y quería dar lo máximo de mi. Tras el incidente el equipo me informó de un pinchazo en mi rueda delantera izquierda, por lo que me vi obligado a entrar en boxes. En el pit lane fue golpeado por Kimi con daños en mi suspensión que me obligaron a abandonar, no es la forma ideal de empezar el parón veraniego”.

Guenther Steiner, jefe de Haas F1:

“Día duro para nosotros, con el caos inicial albergábamos alguna esperanza. Fuimos golpeados por un Alfa Romeo y Nikita no tuvo opción de hacer nada al respecto. La nota positiva es la pelea  de Schumacher y Giovinazzi, una lección para él”.

 

Imágenes: @HaasF1Team