La jornada de domingo no comenzaba nada bien para Verstappen: cambios en el monoplaza lo relegaban a la P18 de la parrilla. Pero ya conocemos como es “Mad Max“, un par de giros al COTA y ya se encontraba en el Top 10. Una carrera al ataque, de las que le gustan al holandés. Dos Stints, uno con las gomas amarillas y el del final con las superblandas le han servido para alzarse hasta el segundo cajón del podio del trazado americano. Tal y como ha resaltado Christian Horner por la radio tras cruzar la linea de meta, una conducción muy madura de parte de Max, como se ha reflejado en las últimas 10 vueltas de carrera: acechando a Kimi para luchar por la victoria y manteniendo a raya a un (aún) tetracampeón del mundo detrás.

“Ha sido una victoria un tanto inesperada. Remontar desde la antepenúltima posición hasta el segundo cajón del podío es una sensación increible.

La incógnita del día se ha vivido en la antesala del podio con el holandés y Kimi Raikkonen como protagonistas. Mientras que Max preguntaba con ironía si este año le iban a dejar quedarse en el podio (el año pasado una penalización de tiempo le privó de estarlo), el piloto finlandés le preguntaba a Lewis Hamilton si se había convertido en pentacampeón del mundo.

 

La jornada de Ricciardo ha sido una antítesis total a la de su compañero. Salía desde la segunda fila con aspiraciones a todo. Como en otras 6 carreras más, la fiabilidad no ha estado de su lado. Una buena salida le dejaba en medio de la acción con el Ferrari de Vettel a su espalda y los Mercedes por delante. Su carrera terminó antes de la vuelta 5. Séptimo abandono del piloto australiano (en esta ocasión atribuida a la batería) que no hacen más que aumentar sus ganas para que esta temporada aciaga para él (excepto las dos victorias de comienzo de temporada) llegue a su fin.

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