Concluidos los test tras el GP de Bahrein, unas pruebas fundamentales de cara a las próximas citas, claves igualmente en el desarrollo de los monoplazas. No habrá más hasta julio, la semana consecutiva al GP de Hungría serán los próximos test por lo que lo acontecido en Shakir tendrá su relevancia para afrontar este primer tramo de temporada. Uno de los objetivos fue el entendimiento sobre los neumáticos, una de las preocupaciones de Mercedes quienes ven como Ferrari les ha ganado la partida permitiéndoles a los italianos ser más perspicaces a la hora de la elaborar una estrategia más efectiva.

Mientras los de Brackley adquirieron rodaje a pesar del problema eléctrico de Hamilton el primer día, Ferrari dividía a sus pilotos. Giovinazzi cubría el programa previsto mientras Sebastian Vettel trabajaba con Pirelli en el desarrollo de los neumáticos para la próxima temporada. El de Heppenheim también tuvo sus más y sus menos con la mecánica del SF70-H, con lo cual hubo que prolongar su sesión tras haberse perdido tiempo solventando tal avería en el motor.

Renault también sufrió paradas forzadas de la misma naturaleza. Daniel Ricciardo y Sean Gelael con Toro Rosso debieron regresar al box por otros medios. En los monoplazas de la marca de Dietrich Mateschitz abundaron las pruebas aerodinámicas. En el equipo senior sobre todo, se prevé una segunda versión del RB13 para el GP de España con lo que merecía prestar la mayor de las atenciones y ocupar tiempo en este apartado para intentar reducir la brecha con los líderes. Renault por su parte no se pronunciará hasta el GP de Canadá, añadiendo más importancia si cabe:

“Fue una buena jornada para el departamento aerodinámico. Conseguimos un montón de datos en la primera hora, todo fue como estaba planificado, y eso es importante para los chicos, aunque para un piloto no es la cosa más emocionante ¡ya que sólo estamos girando realmente! Después de eso, hicimos unas pocas vueltas en el neumático blando e hicimos algunos cambios mecánicos, que fueron interesantes, luego completamos un par de tandas con el neumático súper blando. Creo que descubrimos algunas cosas en ese apartado. 

“Se intentan dar algunos pasos más grandes que los que se pueden hacer en un fin de semana, por lo que era interesante ver cuáles eran los resultados de esos cambios. Estábamos planeando unas cuantas tandas largas para la tarde, pero obviamente el problema de la unidad de potencia lo impidió”. Comentó Ricciardo al acabar el día.

Honda siguió agravando la situación. El equipo anglonipón perdió toda una jornada completa prácticamente. Oliver Turvey únicamente pudo dar 2 vueltas de instalación antes de que una fuga en el ERS dejase al MCL32 sin posibilidad de ser propulsado. Por la tarde el piloto británico dio 17 giros, nulos en comparación con cualquiera de los allí presentes. La MGU-H también sigue en el punto de mira, los fallos en este componente se replicaron en los test. En Sakura continúan indagando sobre una de las piezas que más están lastrando.

Novedades también para Haas. La temporada pasada firmaron con un nuevo suministrador de frenos, Carbon Industries. Dejando a un lado a Brembo, siendo esta compañía insatisfactoria en términos de rendimiento y fiabilidad desde la pretemporada en 2016. Pocas sesiones hubieron en ese año en la que el equipo norteamericano no padeciera problemas en estas partes, así pues Romain Grosjean (quien se ha inclinado muy a favor del cambio) equipó los nuevos frenos en el VF17.

Los garajes volvieron a abrirse el miércoles para proseguir con los test. Por lo general, el segundo día fue el más difícil para extraer conclusiones claras. La climatología arábiga se reflejaba en un asfalto abrasivo y arena depositada en ciertos tramos frenaban la constancia de los pilotos. El viento puso de su parte con rachas fuertes, dificultando al trabajo sobre la aerodinámica. En cualquier caso, no había tiempo que perder.

Mclaren se apresuraba para recuperar el tiempo perdido en la jornada anterior, con Stoffel Vandoorne a los mandos y montando una nueva ala trasera. Mercedes también se hallaba inmerso con sensores pitot (tal y como muestra la imagen en portada). Sin embargo, Valtteri Bottas tuvo que necesitar la asistencia de la grúa tras quedarse parado. Bandera roja para habilitar la retirada del W08, sin impedimentos posteriormente para continuar el día, finalizando con 143 vueltas y el mejor tiempo. Mercedes realizó un plan de trabajo similar al martes, tandas largas y estudio sobre los neumáticos.

 

Ferrari anteriormente detectó una fuga hidráulica en el monoplaza de Sebastian Vettel, perdiendo gran parte de la mañana en la solución de las mismas. La reanudación tras el almuerzo dio un respiro al equipo pudiendo retomar sin contratiempos el planning. Fructíferas pruebas para el Cavallino que se marcha de Shakir con un buen kilometraje en el bolsillo.

Sin mayores incidencias, el transcurso del segundo día fue notoriamente más calmado. Mclaren pudo completar 81 vueltas sin rastro de las fallas sucedidas, Eric Boullier comentaba para la prensa alemana el alivio que suponía:  “Éste es nuestro mejor día del año. Nunca antes habíamos podido trabajar tanto”.

 

 

 

Autor: Pablo Bernal / @PabloBernal333

Foto: Sutton Motorsport Images